Semáforo
Pequeña deidad de la avenida
espíritu de cable
ruega por nosotros
desde el cielo
de tu poste compasivo
Guía con los ojos de tu luz
A tus chatarras descarriadas
Aleja de tus suelas los malos pensamientos
Aceleradas al impulso lujurioso del metal
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Siempre es maravilloso ver cómo nace un nuevo escritor, sentir como se fortalecen sus textos, como el joven arbusto que ve crecer sus ramas hasta convertirse en árbol frondoso...Dayana es una de las integrantes de mi taller de poesía Imago Mundi 2007. Con su cabello alborotado y su presencia dulce de maga, Dayana llegaba con el cuerpo pleno y múltiple de poemas y cuentos, bien escritos, bien vividos...es un orgullo para mi presentar una mínima parte de su trabajo maravilloso. una fría cerveza en tu nombre mi niña.
mh
2 comentarios:
Sencillo y estupendo, cómo hasta los semáforos son punto de partida para la poesía. Sobre todo este objeto que ve tantas miserias rodar frente a él, sin inmutarse, sólo parpadeando sus colores con triste indiferencia.
Lo que más admiro de este poema, es cómo algo tan inerte, tan siempre despercibido e incluso irrespetado como un semáforo, puede convertirse con unas cuantas palabras, en un objeto con tanto sentido que incluso puede inspirar un poema...
Saludos.
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